miércoles, 2 de enero de 2013

J.A. Valente


Cómo se abría el cuerpo del amor herido...

Cómo se abría el cuerpo del amor herido
como si fuera un pájaro de fuego
que entre las manos ciegas se incendiara.

No supe el límite.

Las aguas
podían descender de tu cintura
hasta el terrible borde de la sed,
las aguas.

De "Material memoria"

No hay comentarios:

Publicar un comentario